Estos días he disfrutado de dos de los regalitos que me hicieron por mi cumple.
Uno, de Marina, fue la peli
Olvídate de mi. No la conocía. Y al ver la cáscara del dividí las únicas referencias que tuve eran que salía Jim Carrey, que no me inspira mucha confianza, la verdad, y que salía también Frodo...
Ha sido un descubrimiento. La vi el otro día en casa. Después de un día tontorrón.
La vi solo… me apetecía verla solo. Me hubiera gustado verla con Marina, pero era complicado esperar a que pudiéramos coincidir…
Y me encantó.
Un doctor ha desarrollado una técnica (un poco cabrona, pero no exenta de cierto interés…) para borrar de nuestro cerebro los recuerdos de relaciones pasadas, y un tipo descubre que la que era su pareja ha usado esa técnica para borrarle…
Habla de la pareja, del amor, de los recuerdos y los deseos y las expectativas…
Interesante… y muy chula visualmente… un guión que no te deja pestañear, porque si lo haces te despistas…
Y este señor de cara preocupada es Vicente Blasco Ibáñez, escritor valenciano (1867-1928), del que no había leído nada hasta ahora, y de quien Ibis me regala
La barraca.
Un retrato feroz de la opresión, de la explotación, de la (in)solidaridad entre iguales… y escrito antes de terminar el siglo xix...
Otro libro a añadir a mi lista de libros que cuentan cómo son las cosas mejor que los libros de historia, como El Jarama, Nada, Pascual Duarte, etc…
[Tengo que buscar un nombre más interesante para este tipo de libros… se admiten sugerencias…]
