viernes, abril 07, 2006

sono un coglione...

El otro día, Berlusconi, en la campaña electoral italiana, con ese estilo elegante y sutil que le caracteriza, llamó gilipollas a los votantes de izquierda...
Ha conseguido, contra su voluntad, una de esas cosas que últimamente son complicadas: la unión de la izquierda.
Ha conseguido que la izquierda se aglutine en torno al grito de "soy un gilipollas" y se una para echar de una vez a este delincuente, manipulador y corrupto...
Espero que así sea y que este tiparraco desaparezca del mapa político europeo. Como desapareció aquí el embustero hace un par de años...
La parte fea, como leía hoy en algún artículo, que su intención era desviar la atención de los temas importantes. Y eso lo ha conseguido.
Free counter and web stats