miércoles, noviembre 29, 2006

...no es demasiado fácil.

- […] No tengo doble vista, pero a veces acierto en mis sospechas.
- ¿Y qué sospecha?
- Nada demasiado importante, Gabriel. Un poco que anda dando vueltas como buscando algo que no aparece. Espero que no sea sólo un botón de camisa.
- Tampoco es el Tao, querida Claudia. Algo muy modesto, en todo caso, y muy egoísta; una felicidad que dañe lo menos posible a los demás, lo que ya es difícil, en la que no me sienta vendido ni comprado y pueda conservar mi libertad. Ya ve, no es demasiado fácil.

De la novela Los premios (1960), de Julio Cortázar [1914-1984].
Free counter and web stats